Para la mayoría, diciembre es un mes para celebrar, estar en familia y disfrutar de momentos especiales, y como es de esperar, todo esto acompañado de ricos aperitivos, cenas -y muchas veces- de bebidas alcohólicas. Desde Clínica Andes Salud Chillán queremos aconsejarlo para no caer en excesos y evitar ese sentimiento de culpa al día siguiente.
La profesional, Alejandrina Gajardo, Nutricionista de Clínica Andes Salud Chillán, nos comenta todo sobre cómo evitar consumir en exceso y las consecuencias que esto trae para nuestro cuerpo y bienestar
Para mantener una alimentación saludable debemos considerar 4 pilares fundamentales:
Una medida universal es asegurarse de consumir productos en buen estado, de un origen conocido que asegure la calidad, y que sea elaborado con todas las medidas sanitarias adecuadas.
Tanto en la cena de Navidad como en la de Año Nuevo, las bebidas alcohólicas siempre están presentes. En forma de vino u otros licores con mayor graduación, las bebidas alcohólicas son uno de los excesos que peores consecuencias nos trae y no solo por provocar complicaciones de salud.
Estas bebidas se caracterizan por ser calorías vacías, es decir, que suman al total calórico ingerido en el día, pero no aportan ningún tipo de energía que nuestro cuerpo pueda aprovechar. A mayor graduación de una bebida alcohólica, mayor será su aporte calórico y, si además, está mezclada con bebidas azucaradas, este se incrementa.
Las bebidas alcohólicas son capaces de distorsionar nuestras señales de hambre y saciedad, además de las consecuencias negativas, como los problemas digestivos, en la resaca y en la acidez que podemos llegar a sentir al día siguiente si bebemos y comemos sin moderación.
Para limitar el consumo de bebidas alcohólicas durante las cenas, comidas y celebraciones, la especialista propone un sencillo truco: para el brindis, lo mejor es rellenar la copa una sola vez. Luego en forma paralela, debe ir bebiendo y rellenando el vaso con agua. Al ver que en la copa sigue habiendo líquido, se incrementa la ingesta de agua y no de alcohol. Y, por último, y sobre todo para después de las cenas y las comidas, tomar el “falso gin-tonic”: en una copa poner agua mineral con gas, limón y trozos de fruta, esto nos ayudará a mantenernos hidratados durante la celebración.
La mayoría de los alimentos consumidos en las fiestas de fin de año, son hipercalóricos y además irritantes para el sistema digestivo, Entonces, para evitar problemas, debe evitar las frituras, prepare las comidas al horno, cocidas o a la olla, la recomendación es consumir productos en forma moderada e intentar ingerir en forma conjunta verduras y alimentos saludables.
Los horarios de comida son fundamentales, evite comer y beber demasiado en el trasnoche, la sobrecarga de alimentos en un horario destinado para el reposo, generará síntomas, como distensión abdominal (hinchazón), ruidos abdominales, dolor y eventualmente diarreas o vómitos, pirosis (acidez) y regurgitación. La recomendación es ir a dormir, dos horas después de haber comido. Lo mejor es tratar de no desordenarse. Mantener las cuatro comidas al día, y dos colaciones, además de fraccionar la ingesta diaria, y no pasar largos períodos de ayuno, es decir no más de 4 horas sin ingerir alimento.
Alejandrina Gajardo
Nutricionista
Clínica Andes Salud Chillán
Con el objetivo de recordar el impacto que tiene el tabaquismo en la salud y ...
En el mundo, 1 de cada 3.000 personas es diagnosticada con esclerosis múltiple, una enfermedad ...
Esta pequeña, pero poderosa glándula con forma de mariposa, cumple funciones esenciales en el organismo, ...